A medida que pasa el tiempo, los criterios arquitectónicos se adaptan al conocimiento colectivo y a las cualidades que consideramos fundamentales. Aunque el enfoque de la práctica ha evolucionado a lo largo del constante proceso de construcción de la disciplina, el objetivo principal de la arquitectura sigue siendo el mismo desde que el humano extiende la búsqueda de su habitar más allá del simple hecho de dar cobijo, y es el de elevar nuestra relación existencial del estar en el mundo.

La partida se da por las condicionantes del lugar, su programa y el marco de construcción. Una casa de una sola planta diseñada para atender las diversas necesidades de una familia en búsqueda de un hogar. Sobre un terreno de 300m² con sus correspondientes retranqueos obligatorios, se establece una malla ortogonal que dialoga con el perímetro, buscando disfrutar del espacio como un jardín con toda su iluminación y ventilación natural. La casa, de 160m² de área construida sobre una gran losa plana de concreto, se abre hacia el pequeño entorno y lo envuelve en su conjunto.

Imaginamos un espacio continuo entre la calle y la casa, donde los límites se disuelven y conviven. Una serie de columnas circulares que configuran un paisaje doméstico, donde el espacio-estructura es la matriz de base y el objetivo no es el objeto sino la experiencia. La trama, estructura el programa y lo sostiene, no altera el suelo. La rampa extiende el suelo y el uso, para mirar por arriba un paisaje de sierras y llanura.

El Turó del Coll es uno de los pocos espacios naturales que se conservan casi vírgenes en la ciudad de Barcelona. La vivienda aprovecha la oportunidad de vivir en relación directa con la naturaleza sin salir de la ciudad, integrándose en este entorno y estableciendo una transición entre el entorno urbano y el monte. Es un posicionamiento biofílico, que potencia la idea de que todos formamos parte del medio natural.

La residencia se sitúa frente al Parque Hipólito Yrigoyen, el más extenso y principal de la ciudad de San Rafael. Su composición se da mediante la articulación de dos volúmenes; el primero, de mayor prominencia, adopta una estructura en forma de cuadrícula de 6 x 6 metros, albergando todas las funciones esenciales de una vivienda.