Tienda PRADA, Tokyo

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Herzog & de Meuron – Tienda PRADA, Tokyo

Herzog & de Meuron – Tienda PRADA, Tokyo

Hace algunos años la cadena de tiendas Prada comenzó una búsqueda de proyectos experimentales que actuaran como epicentros apuntando a redefinir la estrategia de ventas. La idea es “darle una nueva forma tanto al concepto como a la función de salir de compras, el placer y la comunicación, promover la fusión del consumismo y la cultura”, además de “investigar la idea de un local en si mismo y el potencial de nuevos materiales y sus combinaciones”. El nuevo epicentro Prada Tokyo de Herzog & de Meuron (2003), que sigue al de NY de OMA/Koolhaas (2001), es uno de los ejemplos más extremos y caros de la ambición de la moda por la alta arquitectura y la credibilidad que viene con ella. La ubicación elegida por Prada no es causal. Tokio está obsesionada por las marcas y Omote Sando es la calle escaparate de Tokio. El resultado: una vidriera de 83 millones de dólares.

Herzog & de Meuron – Tienda PRADA, Tokyo

Se trata de un edificio absolutamente no convencional de seis pisos cuyo rasgo particular son los paneles de vidrio con formas de diamante que constituyen su fachada. El edificio se implanta en la esquina del terreno dejando parte de la superficie libre para generar una plaza pública adyacente al mismo, un gesto importante en una ciudad densamente construida. Se crea una superficie que sirve como acceso al subsuelo cubierta de musgo tratado como si fuera un material textil, que se cosió sobre una malla de acero que se irriga desde la parte trasera del muro. Las proporciones del edificio se corresponden mas con una componente doméstica que con una torre. El resultado formal aunque remite a una imagen de una casa o una joya responde en realidad a las regulaciones en el control de sombras de Tokyo.

La estructura funcional del edificio se organiza de la siguiente manera: subsuelo, deportes; primer piso, marroqiuinería; segundo piso, hombres; tercer piso, mujeres; cuarto piso, zapatería; quinto piso, clientes vip; sexto piso, espacio para exhibiciones y performances.

Herzog & de Meuron – Tienda PRADA, Tokyo

Los elementos físicos del edificio que definen el espacio y proporcionan la estructura son los tubos horizontales y la celosía de acero con forma de diamante de la fachada. El resto de la organización tectónica es inmediata: varias losas horizontales -que no cubren la totalidad del área-, los tres núcleos de comunicación vertical que las conectan y los tres tubos horizontales con formas romboides que van por el lado libre de las losas y se intersectan con los planos verticales de la membrana.

El local presenta aspectos tecnológicos que se han tornado fundamentales en los locales de venta de Prada. La arquitectura inspiró una solución lumínica simple. La distribución de las luminarias dependió de las funciones del espacio; en circulaciones y almacenaje menos iluminación y en los probadores más. Cuando cae la noche el edificio brilla gracias al sistema decorativo de luminarias y a los proyectores de imágenes que crean ilusiones ópticas que son proyectadas al interior de los tubos y una pared. El único efecto que se mantiene de NY es el de los cambiadores intercativos donde las separaciones verticales de vidrio cambian de transparente a opacas cuando te paras en un boton en el piso. También están las touch screens tipo ‘snorkels’ que muestran imágenes y luz y suministran información acerca de las últimas colecciones, imágenes de los desfiles y detalles de los productos. Existen también las ‘duchas de música’ que son áreas acústicas especiales con música tranquila y confortante.

Herzog & de Meuron – Tienda PRADA, Tokyo

Herzog & de Meuron – Tienda PRADA, Tokyo

H&deM dispusieron de una amplia gama de materiales para este Prada. Estos son o híper artificiales, como resina, silicona ‘orgánica’, fibra de vidrio moldeada, laca, fibra óptica incrustada en resina, conglomerados de espuma rígida, nylon, acero, cristal; o híper naturales, como cuero, musgo, planchas porosas de madera o piel de pony.

El equipamiento fue diseñado exclusivamente para el local explorando una nueva faceta en el estudio. Combinando materiales de manera innovadora se diseñaron mesas que albergan productos, racks de exhibición y bancas con la intención de ser comercializadas.

En comparación con el Prada SoHO de Rem Koolhaas donde reina la versatilidad y se sacrifica el espacio comercial en pos de un ambiente de intercambio cultural y recreativo, el Prada Tokyo es exclusivamente un lugar de exhibición de mercancías apuntando al consumo. La entrada principal agujerea la colmena estructural al nivel de piso, extendiendo la plaza dentro de la tienda. La fachada vidriada no solo sirve como elemento arquitectónico funcional, sino que resalta el diseño interior. Los núcleos verticales y los tubos horizontales dispuestos singularmente, el fluido, las circulaciones cruzadas y los espacios interiores blancos impecables guían a los clientes de un piso a otro, perdiéndose la noción de espacio y haciendo que el edificio se vea como un único continuo arquitectónico sumándose a la sensación surreal de que no es una tienda sino un paseo por un origami desdoblándose.

Se le da gran importancia a las vistas revertiendo el típico énfasis japonés de mirar hacia adentro. La forma exterior junto con la piel, mas el espacio interior intenta dar a la identidad del edificio un “carácter oscilante” que es atribuido al uso de los tres tipos de vidrio de afuera –cóncavo, convexo y plano- y a los tubos horizontales y los soportes verticales de adentro. Los tubos horizontales crean yuxtaposiciones entre los espacios privados y las áreas abiertas más fluidas. El vidrio actúa como un ojo entre la ciudad y la tienda y viceversa, a veces distorsionando o a veces focalizando las vistas. Como algunos vidrios son curvos, parece que se mueven cuando caminas alrededor del mismo creando un carácter único para el edificio, basado en la hora del día, clima, posición del observador y otras variables. Esta arquitectura altamente comunicativa contrasta con el carácter introvertido del epicentro NY.

Herzog & de Meuron – Tienda PRADA, Tokyo

La poética fundamental de este edificio pasa por lo informe jugado exclusivamente a la piel. Una piel que se extiende a través del mismo dando una idea de espacio de compras único y continuo. La tienda funciona como una inmensa herramienta perceptiva. Las geometrías distintas de los paneles de vidrio generan reflexiones facetadas que llaman a los visitantes a interactuar con las diversas curvaturas ya sea dentro o fuera del edificio; a ver imágenes siempre cambiantes y perspectivas casi cinematográficas de los productos de Prada, la ciudad y de ellos mismos. Se juega mucho a la iluminación del edificio para lograr que éste sea un escenario en todo momento. Mas allá de la piel está el elemento mas importante del edificio y el mas relevante para su propósito: un lugar para la moda. El concepto general es que el edificio entero sea parte de la experiencia del salir de shopping, redefiniendo el evento mismo y convirtiéndolo en un hibrido entre el consumo y la cultura. Prada Aoyama es un nuevo local que respira nueva vida en el mundo arquitectónico del diseño de una casa de moda. Se posiciona eliminando la diferenciación tradicional entre arquitectura, vidrieras y exposición. Todo es una exposición, todo es arquitectura. De hecho todo es un espectáculo, todo es publicidad. Ésta arquitectura altamente táctil y texturada que a su vez es altamente estratégica, se contrapone a la solución adoptada por Koolhaas en NY que apuesta a lo tecnológico y visual.

Mas allá de que Prada Tokyo forma parte de la ultima tendencia del estudio de la exploración de lo informe (Biblioteca dela Universidadde Cottbus, Proyecto del MOMA de Mueva York, Estadio Allinz-Arena entre otros) continua el énfasis puesto en la piel a través del manejo del material, las juntas, los ritmos y las texturas. 

Le Corbusier

Le Corbusier

La arquitectura es el juego sabio, correcto y magnífico de los volúmenes reunidos bajo la luz. Nuestros ojos están hechos para ver las formas bajo la luz: las sombras y los claros revelan las formas. Los cubos, los conos, las esferas, los cilindros o las pirámides son las grandes formas primarias que la luz revela bien: la imagen de ellas es clara y tangible, sin ambigüedad. Por esta razón son formas bellas, las más bellas. Todo el mundo está de acuerdo con esto: el niño, el salvaje y el metafísico. Es la condición esencial de las artes plásticas.

Le Corbusier, Hacia una Arquitectura. Vers une architecture, París 1923. Compilación de artículos escritos para la revista L’Esprit Nouveau, publicados entre 1920 y 1925

Le Corbusier

Charles Édouard Jeanneret-Gris, más conocido, a partir de la década de 1920,1 como Le Corbusier (La Chaux-de-Fonds, Romandía, Suiza; 6 de octubre de 1887 – Provenza-Alpes-Costa Azul, Francia; 27 de agosto de 1965), fue un teórico de la arquitectura, arquitecto, diseñador y pintor suizo nacionalizado francés. Es considerado uno de los más claros exponentes del Movimiento Moderno en la arquitectura (junto con Frank Lloyd Wright, Walter Gropius, Alvar Aalto y Ludwig Mies van der Rohe), y uno de los arquitectos más influyentes del siglo XX.

Nació en la localidad de La Chaux-de-Fonds, en la Suiza francófona con el nombre de Charles Edouard Jeanneret-Gris. A los 29 años se trasladó a París donde adoptó el seudónimo Le Corbusier, variación humorística (ya que evoca a la palabra cuervo) del apellido de su abuelo materno: Lecorbésier. Su padre se dedicaba a lacar cajas de relojes para la industria relojera de su ciudad natal, y su madre fue pianista y profesora de música.

En 1900 Le Corbusier comenzó su aprendizaje como grabador y cincelador en la Escuela de Arte de La Chaux-de-Fonds, en Suiza. Uno de sus profesores, Charles L’Eplattenier, le orientó hacia la pintura y después hacia la arquitectura. En 1905 diseñó su primer edificio, una casa unifamiliar para un miembro de la Escuela de Arte, la Villa Fallet. En los siguientes diez años hizo numerosos edificios, que todavía no llevan su sello característico posterior, y que él mismo no incluyó en el registro posterior de sus obras.

Ya en París, trabajó durante quince meses en el estudio de Auguste Perret, arquitecto pionero en la técnica de construcción en hormigón armado. A continuación viajó a Alemania para estudiar las tendencias arquitectónicas de ese país. Allí trabajó en la oficina de Peter Behrens, donde coincidió con Ludwig Mies van der Rohe y Walter Gropius, quienes también trabajaron ahí en esa época, aunque probablemente no a la vez.El año 1911 lo dedicó por completo a viajar. Desde Viena fue a Rumanía, Turquía, Grecia e Italia y a su regreso fue profesor durante dos años en el departamento de arquitectura y decoración de la Escuela de Arte de París.

En 1922, Le Corbusier comienza a trabajar con su primo Pierre Jeanneret, con el cual mantuvo su asociación hasta 1940, y abren su despacho de arquitectura en la rue de Sèvres en 1924.Inicialmente los dos diseñaron casi exclusivamente edificios residenciales. Uno de sus grandes proyectos de estos años, en este caso como urbanista, es su diseño conceptual de una ciudad de tres millones de habitantes, la Ville Contemporaine (Ciudad Contemporánea).

Casa Curutchet

En octubre de 1929 Le Corbusier dictó en Buenos Aires un ciclo de diez conferencias, invitado por la Asociación Amigos del Arte. En este viaje también visitó Río de Janeiro, Asunción, y Montevideo. En referencia a la primera de las ciudades citadas dejó bien clara su percepción de urbanista al expresar: «Buenos Aires es una ciudad que le da la espalda a su río», aludiendo con esto a algo de lo que aún adolece tal ciudad: pese a tener una extendida costa frente al gran estuario del Río de La Plata se ha privilegiado ediliciamente un área que no permite la vista a tal estuario, más aún el acceso al mismo se halla obstaculizado por instalaciones de antiguos puertos, un aeropuerto, tramos ferroviarios a nivel y autopistas. Los temas de estas conferencias son publicados en 1930 en el libro «Precisiones».

La única obra de Le Corbusier en la Argentina es la Casa Curutchet, una vivienda unifamiliar construida en la ciudad de La Plata, capital de la Provincia de Buenos Aires, entre los años 1949 y 1953. En Brasil construirá la embajada de Francia (Brasilia)4 y el Edificio Gustavo Capanema (Río de Janeiro), ambos con la colaboración de arquitectos locales.

Le Corbusier fue un trabajador incansable. Realizó innumerables proyectos, de los cuales muchos nunca llegaron a realizarse, pero que marcaron a generaciones posteriores de arquitectos.

Difundió también sus ideas urbanas a través del CIAM (Congreso Internacional de Arquitectura Moderna) uno de cuyos documento es la Carta de Atenas. Sin embargo, fue únicamente en Chandigarh, India, donde pudo hacerlas realidad.

El 27 de agosto de 1965, desobedeciendo las indicaciones de su médico, Le Corbusier fue a nadar mientras pasaba sus vacaciones en su cabaña en Roquebrune-Cap-Martin, en el Mediterráneo francés. Fue encontrado muerto por unos pescadores, presumiblemente de un ataque al corazón.

Contribuciones teóricas a la arquitectura

Le Corbusier fue, además de un gran arquitecto y pintor, un eminente teórico de la arquitectura. Escribió varios libros, en los que ejemplificaba sus ideas mediante proyectos propios (a la manera clásica como lo hizo en su momento, por ejemplo, Andrea Palladio en I Quattro Libri dell’Architettura)5 Tuvo muy claro que, aparte de saber crear buenos edificios era necesario saber explicarlos y transmitirlos al resto de los profesionales y a los estudiantes, y ejerció con gran maestría la tarea de publicitar su propia obra.

Como visionario, Le Corbusier veía la posibilidad de cambiar el mundo a través de la arquitectura. Si bien nunca se alió con un grupo político en particular, su postura estaba más cerca de una postura liberal (algunos lo han descrito como un socialista, adjetivo que probablemente se queda corto para caracterizar sus actividades), y como tal, veía todo proceso de diseño con fines utópicos. Lo que le permitió contribuir grandemente al significado de la arquitectura en general.

La machine à habiter

Le Corbusier es conocido por su definición de la vivienda como la máquina para vivir también llamada la máquina para habitar traducido literalmente. Con ello, Le Corbusier ponía en énfasis no sólo la componente funcional de la vivienda, sino que esta funcionalidad debe estar destinada al vivir, comprendiéndose esto último desde un punto de vista metafísico. Le Corbusier creía que el objetivo de la arquitectura es generar belleza (muy conocida también es su frase: la Arquitectura es el juego sabio, correcto y magnífico de los volúmenes bajo la luz), y que ésta debía repercutir en la forma de vida de los ocupantes de los propios edificios.

En cuanto al criterio de «máquina de habitar», Le Corbusier estaba deslumbrado por las entonces nuevas máquinas: en especial los automóviles y aviones, considerando aquellos que tenían diseños prácticos y funcionales como modelo para una arquitectura cuya belleza se basara en la practicidad y funcionalidad; el racionalismo.

L´Esprit Nouveau

A fin de divulgar sus ideas sobre la arquitectura y la pintura, Le Corbusier fundó en 1920, junto con Amédée Ozenfant y Paul Dermée, una revista de divulgación artística que obtuvo gran resonancia internacional: L’Esprit Nouveau (El Espíritu Nuevo; aunque en francés la palabra esprit suele tener también el significado de conciencia, razón, inteligencia)cuyo primer número data del 15 de octubre de 1920 y el último en 1925. En 1923 Le Corbusier publica una recopilación de artículos de la revista en su libro «Vers Une Architecture».

Los cinco puntos de una nueva arquitectura

En 1926 Le Corbusier presenta un documento donde expone en forma sistemática sus ideas arquitectónicas: los llamados «cinco puntos de una nueva arquitectura» representan una importante innovación conceptual para la época, aprovechando las nuevas tecnologías constructivas, derivadas especialmente del uso del hormigón armado (hasta entonces este material se usaba en viviendas y monumentos disfrazándosele de piedra esculpida con molduras):

  1. La planta libre: para Le Corbusier, la planta baja de la vivienda, al igual que la calle, pertenecía al automóvil, ya sea para circulación o aparcamiento, por este motivo la vivienda se elevaba sobre pilotis dejando toda la planta baja libre para permitir el movimiento de los vehículos.
  2. La terraza-jardín: para Le Corbusier la superficie ocupada en planta por la vivienda debía de ser devuelta a la naturaleza en forma de jardín en la cubierta del edificio, convirtiendo el espacio sobre la vivienda en un ámbito aprovechable para el esparcimiento, que además permitía mantener condiciones de aislamiento térmico sobre las nuevas losas de hormigón.
  3. Los «pilotis»: aprovechando la acción conjunta de las losas de hormigón y los pilares metálicos, estos últimos tienen un consumo de suelo en la vivienda despreciable comparado con los muros de carga tradicionales o los pilares de ladrillo u hormigón. De esta forma, se mejora el aprovechamiento funcional y de superficies útiles, liberando a la planta de condicionantes estructurales.
  4. La ventana longitudinal: por el mismo motivo del punto anterior, también los muros exteriores se liberan, y las ventanas pueden abarcar todo el ancho de la construcción, mejorando la relación con el exterior.
  5. La fachada libre: complementario del punto anterior, los pilares metálicos se retrasan respecto de la fachada, liberando a ésta de su función estructural.

Su arquitectura resulta ser altamente racionalista, depurada ( con el uso de materiales sin disimularlos; nota la posible belleza de las líneas depuradas, sin adornos, sin elementos superfluos) y con un excelente aprovechamiento de la luz y las perspectivas de conjunto, dando una sensación de libertad (al menos para el desplazamiento de la mirada) y facilidad de movimientos.

El Modulor

Ideó el Modulor, sistema de medidas basado en las proporciones humanas, en que cada magnitud se relaciona con la anterior por el Número Áureo, para que sirviese de medida de las partes de arquitectura. De esta forma retomaba el ideal antiguo de establecer una relación directa entre las proporciones de los edificios y las del hombre.

Moneda conmemorativa donde aparece el Modulor de Le Corbusier

Tomó como escala del hombre francés medio de esa época: 1,75 m de estatura; y más adelante añadió la del policía británico de 6 pies (1,8288 m), lo que dio el Modulor II. Los resultados de estas investigaciones fueron publicados en un libro con el mismo nombre del Modulor.

Le Corbusier fue uno de los miembros fundadores del Congreso Internacional de Arquitectura Moderna. En 1930 adoptó la nacionalidad francesa. Unos años después realizó su primer viaje a los Estados Unidos.

Le Corbusier se hizo famoso como uno de los líderes del llamado estilo internacional, junto a Ludwig Mies van der Rohe, Walter Gropius y otros. Fue un arquitecto muy admirado en su época e influyó a varias generaciones de arquitectos.

Su afán creador queda expresado en Le Poème de l’Angle Droit (El poema del ángulo derecho —ángulo recto—); especialmente en Fusión:

Asentado en demasiadas causas mediatas
asentado junto a nuestras vidas
y los otros están allí
y por todas partes están los: «¡No!» Y siempre más contra
que por
No condenar pues a aquél
que quiere asumir su parte en los
riesgos de la vida. Dejad
que se fusionen los metales
tolerad las alquimias que
por lo demás os dejan libres
de castigo
Es por la puerta de las
pupilas abiertas por donde las miradas
cruzadas han podido conducir al
acto fulminante de comunión:
«El ensanchamiento de los grandes
silencios»…
La mar vuelve a descender
a lo más bajo de la marea para
poder subir de nuevo a tiempo.
Un tiempo nuevo se ha abierto
una etapa un plazo un relevo
Así no nos quedaremos
sentados junto a nuestras vidas.

Barbacoa en el centro

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Resolución de Accesibilidad de la Intendencia Municipal de Montevideo

El pasado 15 de diciembre de 2008 el Intendente Municipal de Montevideo, Dr. Ricardo Ehrlich  firmó la resolución nº 5529/08 (ver texto completo) que sustituye  el Titulo XIV «De las Disposiciones Especiales para Proyecto y Acondicionamiento Urbano para Personas Discapacitadas», Parte Reglamentaria del Libro XVI «Del Planeamiento de la Edificación», del Volumen XV «Planeamiento de la Edificación», del Digesto Municipal, por el TÍTULO XIV DE LAS DISPOSICIONES ESPECIALES DE ACONDICIONAMIENTO URBANO Y EDIFICACIONES PARA PERSONAS DISCAPACITADAS.

Esta actualización fruto de un convenio entre la Intendencia Municipal de Montevideo, la Sociedad de Arquitectos del Uruguay y UNIT, será de aplicación en las vías, espacios y equipamiento urbano y en los edificios y equipamientos edilicios, ya sean de uso público o privado a construir, reformar o ampliar y en todos los casos será de aplicación la Norma UNIT correspondiente a la cual se hace referencia (las que pueden ser bajadas gratuitamente del sitio web de UNIT: www.unit.org.uy)

Este avance importantísimo que propiciará la gradual eliminación de las barreras arquitectónicas y urbanísticas, facilitando la inclusión e integración de todas las personas se suma a las varias actividades realizadas en 2008 que es prioridad dentro de la política de Responsabilidad Social de UNIT, entre las que destacamos:

así como también una serie de eventos realizados por varias instituciones vinculadas a la temática que eligieron como sede al Instituto, local accesible y disponible para uso por cualquier asociación que tenga objetivos similares.

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Cómo trabajan los arquitectos?

El trabajo del arquitecto que proyecta una edificación se especifica mediante un contrato que describe su «misión» o Encargo.

Ésta incluye la totalidad o parte de las fases siguientes:

Diseño Anteproyecto: La primera fase, donde se plasma a grandes rasgos la idea general de la edificación en planos muy esquemáticos, a escala pero sin acotar. Su función es la de reflejar gráficamente las diversas zonas, por usos, y la imagen global de la edificación, para su aprobación por parte del propietario o promotor.

Proyecto Básico: Refleja la concepción general del edificio: forma, funciones, distribución, sistema constructivo. Se plasma en dibujos, modelos informáticos o maquetas, con una memoria descriptiva y un presupuesto general. Sirve para consultar aspectos concretos de su idoneidad urbanística en organismos oficiales y solicitar licencias.

Proyecto de Ejecución: Es el conjunto de documentos adecuadamente definidos para poder construir una obra. Incluye el desarrollo de los estudios técnicos de estructuras, instalaciones, urbanización, etc., frecuentemente realizado con la participación de técnicos especializados en cada materia. El arquitecto desempeña en este caso el papel de director y coordinador. Se trata de representar en planos técnicos, con nomenclatura técnica, dibujos muy precisos. Se complementa con una memoria describiendo las soluciones elegidas, el riguroso cumplimiento de la normas urbanísticas y constructivas (en formularios oficiales), pliegos de condiciones y un presupuesto detallado por capítulos.

Construcción

Dirección de la construcción: El arquitecto dirigirá y coordinará la intervención de la empresa constructora y de los técnicos que participen en algunas fases, o durante toda la obra, de tal modo que el edificio responda a las especificaciones del Proyecto y a la «buena práctica constructiva.» Al finalizar las obras el arquitecto emitirá un «certificado oficial» acreditando la adecuada construcción, indicando el inicio del uso de la edificación o, en su caso, de las obras de urbanización.

Premios de Arquitectura

El premio más prestigioso en la vida de un arquitecto es el «Premio Pritzker», también conocido como el «Premio Nobel de la Arquitectura». Otros premios por excelencia en la Arquitectura son dados por asociaciones profesionales, ya sean nacionales o regionales, como lo son el «American Institute of Architects» (Instituto Americano de Arquitectos) o el «Royal Institute of British Architects» ( Real Instituto de Arquitectos Británicos).

Por qué contratar un arquitecto?

El arquitecto es el profesional universitario que está legal y técnicamente capacitado para realizar diseño, programación y dirección de obras de arquitectura y/o aportar soluciones a problemas urbanísticos o de planificación , como consecuencia de su específica formación técnica, social, económica y artística que lo faculta de manera exclusiva desde el punto de vista ético profesional, para la concepción, ejecución y supervisión de las mencionadas realizaciones.

La intervención de los arquitectos en las más variadas instancias de la creación del entorno, contribuye a garantizar mejores condiciones ambientales generales, a respetar la adecuación a las normativas vigentes y hacer un uso eficiente de los recursos económicos de su cliente, resultando en una mejor calidad de vida, asociada a los niveles de confort que proporciona una adecuada respuesta a los requerimientos de la sociedad y de los usuarios individuales.

La contratación de un arquitecto proveerá al comitente del asesoramiento técnico responsable e imprescindible para culminar con éxito su emprendimiento, basado en la experiencia y conocimientos puestos a su disposición, a cambio de un honorario justo que se constituye en la primera inversión rentable a realizar.

La arquitectura en Uruguay

Desarrollamos proyectos de inversión en Uruguay contando con un equipo técnico multidisciplinar de primer nivel que asesora efectivamente sobre las diversas posibilidades de inversión en el Uruguay.

Nos especializamos en proyectos de inversión inmobiliaria.