Traslaciones sonoras: la construcción de paisajes auditivos en la ciudad
Traslaciones Sonoras es una instalación urbana desarrollada por los arquitectos Mathias Klenner y Sofía Balbontín, académicos de la Facultad de Arquitectura, Diseño y Construcción de la UDLA, en conjunto con estudiantes de arquitectura de la Universidad Austral de Chile.
La intervención explora los diversos paisajes sonoros de Valdivia y su entorno cercano, vinculando territorios y comunidades a través de la traslación en tiempo real de múltiples sonoridades invisibilizadas hacia el centro de la ciudad.
Conoce la propuesta en detalle bajo las palabras de sus autores, a continuación.
Se identifican los sonidos más característicos del entorno local, para luego pasar a la construcción de una serie de artefactos de captación y reproducción de los diversos sonidos. Mediante el uso de la tecnología streaming, se trasladan los distintos espacios sonoros a través de los artefactos de reproducción, conectando acústicamente los distintos territorios y sus comunidades.
El sonido tiene la capacidad de transmitir información que el ojo no ve, puede volver visible lo invisible, audible lo que pasamos por alto (Lebelle, 2018). Esta capacidad es la que se vuelve una herramienta para manifestar voces, prácticas y discursos acallados históricamente. El sonido permite que dichas comunidades y territorios, que están fuera de los circuitos hegemónicos, se infiltren en la palestra pública, se manifieste y sean "visibles".
La idea de trasladar el sonido de un lugar a otro tiene por objetivo conectar dos situaciones sensoriales diferentes, combinando la visión de un espacio con el sonido de otro. De esta manera, se visualizan paisajes sonoros desapercibidos. . A partir del dispositivo arquitectónico y los paisajes sonoros trasladados podemos construir una descontextualización.
Mientras que los artefactos de captación de sonido se encuentran dispersos en los territorios elegidos por su paisaje sonoro, los dispositivos de reproducción se congregan en la Plaza del Péndulo de Foucalt, construyendo una ciudad más sensible hacia su entorno, el cual se hace visible aún sin serlo a través de artefactos de madera y zinc, que atrapan el interés de los ciudadanos presentándose casi como una obra de arte público.